La agonía de FELIPE CASTILLO en la Municipalidad de Los Olivos
En una reciente y “exclusiva” entrevista realizada a Felipe Castillo por el medio de comunicación LA NOTICIA, el cuestionado Alcalde desliza versiones inexactas y mentiras que procedemos a aclarar punto por punto, para que todos los ciudadanos tengan una cabal idea del contexto y las razones de su próxima destitución por uso indebido de recursos públicos para crear la universidad privada denominada “Universidad Científica Tecnológica de Los Olivos”, declarada ilegal por CONAFU.
1. Sobre la Resolución N°489-2011 del JNE, el señor F. Castillo dice que “el JNE se ha limitado a solicitar a la CONAFU el expediente que él presentó, para que el Concejo municipal lo vuelva a revisar. Como que todo empieza de cero, pero ya con documentos”.
En este punto el Alcalde cuestionado admite que durante todo el proceso de vacancia, iniciado el 06 de setiembre de 2010, la Municipalidad ocultó toda la documentación relativa a las gestiones realizadas por él para que CONAFU autorice el funcionamiento de una Universidad Privada usando fondos públicos y autoproclamándose Rector de la misma.
Es sobre la base de la constatación del ocultamiento de información relevante que el JNE, en una decisión excepcional, decide anular su propio fallo que favorecía al Alcalde Castillo, disponiendo que el Concejo Municipal decida la vacancia (destitución) del Alcalde teniendo a la vista: -el expediente presentado por él ante CONAFU,- el acuerdo ilegal de constitución de la Asociación Educativa Promotora de Los Olivos, -el acuerdo de aportación de cuotas, los comprobantes de pago de las gestiones de creación de la Universidad Privada, y -los documentos sobre la disposición indebida del edificio situado en Av. Universitaria 2022.
2. Sobre la solicitud presentada por el Dr. Luis Pastor para que se convoque de inmediato a sesión de concejo para que se declare la vacancia, el señor Felipe Castillo señala…”que el JNE le habría dado 30 días desde la recepción de los documentos, que no les han enviado”.
En esta parte el Alcalde cuestionado falta a la verdad y confirma su voluntad de dilatar lo más posible el procedimiento de vacancia, puesto que si bien es cierto el plazo legal máximo es de 30 días hábiles, dicho término debe contarse desde que el Concejo fue notificado por el JNE el viernes 17 de junio o en el peor de los casos el 20 de junio, fecha en la que CONAFU remitió oficialmente el expediente que proscribió la Universidad privada que creo con los tributos.
De igual manera, se evidencia la mala fe del Alcalde cuestionado cuando pretende señalar que debe esperar que le remitan dicho expediente, cuando siempre ha tenido los documentos originales en su poder, como gestor directo de los trámites realizados en CONAFU. Es una burla.
Lo correcto y transparente hubiera sido que ponga en conocimiento de la ciudadanía, todos los documentos que el mismo ha presentado ante CONAFU y exhiba los comprobantes de pago emitidos por Registros Públicos y por el Notario Luis Gómez Verastegui (quien a la vez es Regidor de la Municipalidad por el partido del Alcalde) para la constitución y registro de la persona jurídica privada, mediante la cual se uso ilegalmente los bienes y recursos públicos para beneficiarse como “Rector” de su universidad privada.
3. Sobre la Universidad de Los Olivos, el señor Castillo admite que usó deliberadamente dos caminos para obtener la licencia:… “el Plan A, a través de una asociación cuyos socios son el Estado, la Municipalidad y la Universidad y quedo trunco porque la CONAFU se opuso y el Plan B, tuvo un final feliz porque ya fue dada la Ley”… Agrega el señor Castillo que…” ya aprobaron sus Estatutos y que van a pedirle una subvención al Estado para que funcione la Universidad”.
En esta parte, nuevamente distorsiona la verdad, en realidad, lo que él denomina “Plan A” consiste en constituir una persona jurídica privada (asociación promotora) independiente de sus asociados, para gestionar la autorización de funcionamiento de su Universidad privada denominada “Universidad científica tecnológica de Los Olivos” ante CONAFU, pero para realizar esas gestiones, no sólo gastaron dinero público sino que además dispusieron y ofrecieron como infraestructura de su “Universidad privada” el edificio sito en Av. Universitaria 2022, que fue construido con los tributos de todos los olivenses.
Semejante ilegalidad no fue avalado por CONAFU que declaro IMPROCEDENTE de plano el pedido del Alcalde para que le autoricen su Universidad privada, porque la entidad promotora carecía de: “facultades para constituirse como promotora universitaria e involucrar recursos públicos para crear una Universidad privada”. Es más CONAFU dispone que el Órgano de Control Institucional de la Municipalidad de Los Olivos inicie una acción de control para investigar esas irregularidades y determine las responsabilidades del Alcalde y sus funcionarios.
De otro lado, el denominado “Plan B”, que culminó con la promulgación de la Ley 29668 que crea la Universidad Municipal de Los Olivos, de carácter pública, gratuita y autónoma, tampoco ha tenido un final feliz, porque el Concejo de los Olivos ha aprobado un Estatuto privatizador a la medida del Alcalde cuestionado, porque autoriza el cobro de pensiones mensuales a los alumnos y pretende convalidar la carencia de meritos académicos y de trayectoria docente del Alcalde cuestionado, que ahora también funge de “Rector” sin tener título de Doctor y sin haber dictado una hora de clase en su vida.
EPILOGO
Felipe Castillo, quiere confundir a la opinión pública, de manera burda. Lo que él llama el Plan A es la infracción consistente en el uso indebido de los tributos municipales en beneficio de su Universidad Privada denominada Universidad Científica Tecnológica de Los Olivos, hecho por el cual se tramita la Vacancia, respaldada por el JNE; y lo que él llama Plan B es la Universidad Municipal de Los Olivos creada por el Congreso de carácter pública, gratuita y autónoma, hoy privatizada mediante Acuerdo de Concejo 13-2011, mediocre al ser nuevamente proclamado Rector, en contra de la disposición de CONAFU. El Alcalde es un infractor reincidente, sus días como tal están contados.
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